Desde esta orilla - TU DUELO CONSCIENTE

Camila llevaba 2 noches sin dormir y una semana con la cabeza como una jaula de grillos; el

ayuntamiento había dicho que sí a su propuesta. Por supuesto, gratis,  pero no le importaba, la

ilusión que llevaba gestando desde que el proyecto le vino a la cabeza, era suficiente pago,

además sabía, que aunque había trabajado a destajo para poder organizarlo y presentarlo, a

ella le serviría de visibilidad, y eso, era un marketing que ahora no se podía pagar.

Pero aquella mañana algo se torció, tras la meditación, una idea le sobreocupaba "a ver si

despues de 7 u 8 años de trabajo personal, ahora iba a mandarlo todo al garete con las

dichosas jornadas"; pensaba.

Reconocía la dicha ya vivida en su fiesta de inauguración, volvía a sentirse poderosa, fuerte y

valiente para comerse el mundo, pero a la vez el protagonismo que estas jornadas le

reportaban, alimentaba su EGO mucho más de lo que hubiese deseado.

No sabía que hacer. Además del estrés, desde la medi, tenía esa sensación de "quiero pero

no", o "no es para tanto, pero sí lo es" que la incomodaba a todas horas.

Intentó buscar refugio en sus amistades. Tras hablar con Gloria, tenía claro que no iba a servir

de ayuda, había conseguido lo que quería, "anda ya, no seas tonta, que EGO ni EGO, tu lo que

tienes que hacer es venderte, y si eso te sirve, pues mejor".

"vale, pues a las niñas no las llamo, voy a llamar a Enrique", se dijo, pero su terapeuta no pudo

atenderla esa mañana y la emplazó para el día siguiente.

Intentó tambien entretenerse en trabajos varios de la casa, lavar las aceitunas, ordenar el

armario de invierno, cambiar las sábanas etc, pero tampoco era la forma, pues el runrun no

cesaba. Decidió entonces hacerse otra medi, esta vez sin guía, ni música, ni mantra... nada de

nada, silencio y quietud.

Tuvo muchas distracciones, pero con amor, como le habían enseñado, volvía a su centro,

vinieron cosas curiosas que anotó mentalmente, pero cuando se daba cuenta, volvía a anclarse

en la respiración. Tan de repente como las demás ideas, llegó la clave que buscaba.... ERES

HUMANA....